miércoles, 21 de mayo de 2008

La Tribunona | Las lágrimas de Busby


Moscú, 01:51 a.m del 21 de mayo de 2008: Bobby Charlton se abraza a Alex Ferguson el día en el que Europa le devolvió al Manchester United la gloria prometida. Con el Olímpico moscovita entregado a sus pies, las dos leyendas vivas de Old Trafford se miran mutuamente, sin una palabra de por medio, hablando con el corazón y esbozando una sonrisa melancólica y llena de recuerdos que lo dice todo.

Seguramente Sir Bobby Charlton se acordó de aquel fatídico 6 de febrero de 1958. En el aeropuerto de Munich se estrelló el avión que transportaba a la mejor generación hasta el momento de la historia del United cuyo objetivo era lograr la antigua Copa de Europa. Murieron ocho jugadores y quince pasajeros. Entre ellos, el alma gemela de Charlton: Duncan Edwards, la gran promesa junto a Sir Bobby, en los que la selección inglesa y Old Trafford tenían puestas sus esperanzas. Pero Edwards no sobrevivió.

Todo ello en el día en el que Cristiano Ronaldo marcó un gol, falló un penalty y rompió a llorar por la tensión acumulada al final de la tanda. Son las lágrimas de un joven, las lágrimas de un campeón, las lágrimas de alguien que ha soportado sobre sus hombros el peso de la historia de los grandes: en Moscú tenía que acallar las voces que le hundían en las grandes citas y estuvo a la altura. Habrá un antes y un después de Moscú para el portugués.

Y eso que el Chelsea maniató a los de Ferguson durante todo el segundo tiempo. El partido fue muy táctico, con dos estilos distintos y dos equipos que se diferencian, primero, por el talento de sus jóvenes y, segundo, por el talonario de sus estrellas. Manchester United y Chelsea dieron una lección sobre el terreno de juego que demostró que, a estas alturas, si les ponen delante a un FC Barcelona o a un Real Madrid se los llevan por delante.

El Man United es campeón por garra, fuerza, hambre, futuro, historia y tradición.

Por eso la Liga de Campeones de este año tiene un sabor especial y una dedicatoria con nombre y apellidos. El desastre de Munich y la muerte de duncan Edwards supusieron un punto de inflexión en la historia del United, al igual que Moscú lo será en un plazo de cinco años. El United tiene la mejor generación de jóvenes de Europa, similar a las de la década de los 50, con los Cristiano Ronaldo, Anderson, Tévez y Nani que, si nadie se mete por medio, son grandes jugadores de hoy, estrellas del mañana.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues yo creo que mereció ganar el Chelsea, por una vez en la vida, y que el Manchester confirmó que para ganar la Champions tienes que tener una flor considerable.

Por cierto, curioso que el Chelsea llegue a la final justo cuando se larga Mourinho. ¿Qué dirán ahora sus acérrimos defensores?

Rodrigo G. Fáez dijo...

Lo de Mourinho es como lo de Espinete: un tio con carisma pero jodidamente sobrevalorado.

La aportación de ambos a sus respectivas actividades profesionales ha sido nula para la historia del entretenimiento y del fútbol.